Carnevale

Recién llegada de Venecia, donde he pasado el fin de semana, sólo puedo decir que todavía sigo alucinada con la ciudad. Siempre había querido conocerla, y me daba miedo que las altas expectativas que tenía sobre la ciudad terminarán con una decepción, pero la verdad es que Venecia está a la altura de su fama. Es un lugar bellísimo, en el que perderse por sus calles (algo habitual en alguien con tan poca orientación como yo) es lo mejor que te puede suceder, porque siempre desembocas en algún rincón lleno de encanto. Además, este fin de semana comenzaban los carnavales, una fiesta que también tenía muchas ganas de conocer. El Carnaval en Venecia es diferente a otro carnavales sobre los que tenía más información, como el de Rio o los de Canarias.

Yo diría que la palabra que lo define es elegancia. Se nota que la gente se trabaja sus disfraces, que son auténticas maravillas,  y las máscaras venecianas llenan las calles de misterio, al esconder los rostros de quienes las llevan. Todos participan en la fiesta, y muchas parejas y familias salen a la calle disfrazadas para dejarse fotografiar por los turistas. Me llamó la atención que incluso los matrimonios formados por las personas más mayores se animaban a formar parte de la fiesta, luciendo disfraces que te dejaban boquiabierto. 

Estas son algunas de las cosas que he visto este fin de semana...

¿ A que son geniales los disfraces?

 Las fotos están todas tomadas por mí. Si quieres utilizarlas, ponte en contacto conmigo: feelslikerome@gmail.com. Gracias!

Cosas del barrio

Uno de los factores más importantes que hay que tener en cuenta cuando se busca piso es el barrio en el que está. A mí me dieron un consejo que me fue bastante útil, y es que la zona tiene que estar bien comunicada y a ser posible, con un par de paradas de nocturnos cerca. Yo cerca de mi casa no tengo parada de metro, pero, sin embargo, en la avenida Gregorio VII, que está a dos pasos de mi calle, tengo varios autobuses que me llevan al centro, al Coliseo, a Termini  ( muy importante, porque los autobuses de los aeropuertos llegan allí), y a la otra parte del Vaticano, a la plaza de Risorgimento y Ottaviano, donde viven la mayoría de mis amigos y está mi Universidad. Por otra parte, tenemos la Estación de San Pietro muy cerquita, desde donde salen trenes al Trastevere, a la estación de Ostiense y a pueblecitos de los alrededores.

También hay dos líneas de nocturnos que paran cerca de mi casa. Esto es importante porque los autobuses dejan de pasar a las 00.00, y el metro cierra también pronto. De hecho, estas últimas semanas, creo que por una huelga, ha comenzado a cerrar a las 21.00. Los nocturnos no pasan con mucha regularidad, pero si los tienes controlados son la mejor forma de volver a casa de noche, a ser posible sin tener que pasar por Termini, un sitio no muy recomendable una vez se ha ido el sol. La otra opción es el taxi, válido para turistas, poco recomendable para estudiantes que tienen que pasar un año en la ciudad. Ninguna carrera te sale por menos de 8 euros.

Aparte del transporte público, desde mi punto de vista hay otros requisitos también importantes:

1. Que esté cerca, o al menos bien comunicado, con la universidad. Mi universidad es la Lumsa, que está al lado de Via della Concilizione, en Via della Traspontina. Desde mi casa tengo un bus que me deja en la puerta y que pasa cada media hora, pero si lo pierdo, puedo ir andando en solo 15 minutos. Cuando busqué piso, tuve la oportunidad de vivir en la Via dello Statuto, que está cerca de Piazza Vittorio Emanuele. Tenía un bus directo a la uni, pero tardaba más de media hora en llegar. Y no me imagino cuánto en pasar. Con lo que ha llovido este invierno, y el frío que hace en Roma, no hubiese ido mucho a la universidad, la verdad. En mi caso, tenía claro que quería ir a clase, así que para mí, es fundamental que sea tan fácil como lo es en mi caso llegar a la universidad.

2. Que tenga buenos servicios. En esto me insistía mucho mi madre, y yo pensaba que era un poco pesada, pero luego me di cuenta de que es muy importante. Sobre todo, es básico tener algún supermercado cerca. Yo tengo tres: Carrefour, Crai y el baratisisisimo Eurospin (quizás haga en el futuro algún post sobre supermercados, en plan mari). También es importante tener una farmacia, un banco, y alguna tienda de chinos no viene mal. Obviemente, si el barrio tiene restaurantes, algún bar y tiendas que le den vida, mucho mejor.

3. Que sea seguro. Para mí es muy, muy importante, sobre todo si eres chica y tienes que volver sola a casa. Como he dicho, los alrededores de Termini son, desde mi punto de vista, muy poco recomendables. Tampoco me gusta mucho San Lorenzo, mejor dicho, algunas zonas de San Lorenzo, como Via Casilina. Conozco gente que ha vivido allí y ha estado muy a gusto, no obstante, es una zona en la que viven bastantes estudiantes. Pero yo sólo he ido de noche y no me termina de gustar. Tampoco es muy seguro el extrarradio de Roma.

4. Que sea bonito. Esto ya es ponerse en plan fino, pero en una ciudad como Roma, encontrar un barrio bonito no es difícil. Además, vas a pasar allí mucho tiempo, así que mejor tener vistas bonitas. Yo, por ejemplo, paso todos los días por la plaza de San Pietro para ir a la universidad. Y eso es algo impresionante y por lo que me siento muy afortunada.

Y valorado todo esto, os doy mi opinión sobre algunas de las zonas que más me gustan.

Mi barrio. Estoy encantada con la zona en la que vivo. Mirando a la plaza de San Pedro, queda a la izquierda. El punto de referencia es la Estación San Pietro y la Via delle Fornaci. Es una zona muy tranquila y muy bien comunicada. Si vas a estudiar en la Lumsa, es muy buena opción.

Prati. Es un barrio caro, pero se pueden encontrar pisos para estudiantes  a precios razonables (entiéndase que en Roma, razonable es 550 la habitación individual y 300 la doble). Tengo varias amigas que viven por allí y por eso paso bastante tiempo en la zona. Hay de todo, muchas tiendas, servicios, y además es muy bonito. La plaza del Risorgimento también está muy bien y además, plagada de buses. Otra zona cercana a Prati que es muy recomendable es Piazza Cavour.

Regina Margherita. Aquí también tengo amigas. Qué se le va a hacer, uno tiene que hablar de lo que conoce. Está relativamente cerca de la universidad de la Sapienza y a mi me parece una de las zonas más bonitas que he visto. Sobre todo, te sorprendes porque no es muy conocida y sin embargo, está llena de vida y tiene sorpresas como Villa Torlonia y el barrio Coppede, que merecen un post aparte.

Estas tres zonas son de las que más puedo hablar porque son las que mejor conozco como barrios para vivir, sobre todo Prati y mi zona. Sin embargo, conozco a muchos estudiantes de Roma Tre que viven por Piramide y Via Ostiense y están muy a gusto. Por otra parte, el centro de Roma, obviamente, es otro buen sitio para vivir, siempre y cuando se encuentre una casa en buenas condiciones y a un buen precio. Tengo unas amigas que vivian en Chiesa Nuova y tuvieron que mudarse porque la casa tenía humedades y pagaban una barbaridad. Hay que ir con cuidado, porque en el centro hay mucho edificio viejo, pero si tienes suerte, puedes encontrar auténticas joyas. También la zona de detrás del Coliseo, por via Merulana o San Giovanni in Laterano, está bastante bien.

La verdad es que si consigues encontrar una zona en la que tengas de todo y estés a gusto, la experiencia de vivir en Roma puede ser mucho más satisfactoria. Yo, después de casi seis meses en Roma, me sigo girando cuando paso por San Pedro para mirar la basílica. Y me siento muy afortunada de poder vivir aquí.

Sabato sera

Después de un viernes por la tarde en San Lorenzo y una mañana en la Galleria Nazionale d´Arte Moderna e Contemporanea (con picnic en Villa Borghese incluido), la tarde del sábado requiere un poco de descanso para afrontar la noche y un domingo de pleno sol en Roma.

Así que me he atrincherado en casa, me he plantado el pijama y este es mi plan: dos de mis revistas favoritas, Vanity Fair y Vogue, y una dosis de Gossip Girl.

Vanity Fair es una de las revistas que compro todos los meses en España. Me encanta. Al llegar aquí, como ya me había anticipado un amigo, me llevé la alegría de que en lugar de mensual, la revista es semanal. La política no tiene tanto peso en la edición italiana, o al menos esa sensación me ha dado, pero la calidad de los contenidos es bastante buena y variada, no sé cómo lo hacen para publicar una a la semana. Por otra parte, e independientemente de que me guste tanto la revista, creo que cuando llegas a un nuevo país es interesante comprar prensa, porque no sólo mejoras el idioma, si no que además aprendes muchísimo sobre la cultura del país.

Ésta no es el número de este mes, creo que es la de diciembre, pero estoy enamorada de esta portada. No soy especialmente fan de la pareja Depp-Paradis, sin embargo, esta foto de Ellen von Unwerth tomada en una fiesta de festival de Cannes, me encanta. De hecho, conservo la revista con la idea de hacer algo con la portada. Sé que es sencilla, pero fue amor a primera vista. Desde que la vi en el quiosco. Qué le voy a hacer.

Y bueno, Vogue Italia es de interés para cualquier persona mínimamente interesada en la moda. Sus editoriales de moda son geniales. Además, como he dicho antes, te permite acercarte a la cultura del país, en este caso, a la forma que tiene Italia de entender la moda, y descubrir algunos diseñadores todavía conocidos únicamente aquí.

Tampoco es el número de este mes. Sí, es otra portada de la que me enamoré. Soy un poco rarita, lo sé. Pero la sesión de Steven Meisel The Power of Glamour, de la que forma parte la imagen de portada, es genial. Inspirada en un atelier en el que las modelos se han las últimas pruebas, todo muy vintage.

Y por último, para terminar la tarde, un capítulo de Gossip Girl. Eso sí, en italiano. Ya he visto toda la serie, pero descubrí http://www.italia-film.com/ y estoy viéndola otra vez desde el principio. Recomiendo Italia-Film a todo el mundo que esté aprendiendo italiano porque están casi todas las series dobladas al italiano y un montón de películas. Yo veo Gossip en italiano primero porque me encanta (lo reconozco), y luego por lo de aprender. Pero pesa más lo primero.

Serena van der Woodsen con vestido de Zuhair Murad. Increíble.



Me encanta este vestido rojo de Oscar de la Renta

El Kaiser llega a Roma

Una vez leí una frase del artista Manolo Valdés  que decía que Nueva York es una ciudad en la que tienes que aprender a renunciar. Se refería a que hay tantas cosas que ver, tanto que hacer, que tienes que aprender a asumir que nunca podrás ni verlo ni hacerlo todo. En Roma sucede algo similar. Es cierto que es una ciudad mucho más tranquila que Nueva York, pero su oferta cultural es inabarcable, y tienes que aprender a organizarte, y a estar con los ojos bien abiertos si no te quieres perder nada. Aparte de los museos, los monumentos y la ciudad en sí, que es una auténtica obra de arte, cada semana llegan nuevas exposiciones que merecen la pena.

Esta semana, por ejemplo, ha llegado al Chistro de Bramante la muestra fotográfica Karl Lagerfeld. Percorso di  lavoro, que explora la faceta de fotógrafo del Kaiser. La exposición recoge instantáneas tomadas por Lagerfeld desde 1987, año en que comenzó a interesarse por la fotografía. Incluye desde fotografías de moda, como las realizadas para la campañas publicitarias de Fendi o Chanel, hasta imágenes pertenecientes a sus viajes privados, lo que permite adentrarse en el imaginario de este genio de la moda.

El Chiostro de Bramante, el lugar que alberga la exposición, es además un sitio quizás no demasiado conocido para los turistas pero sí con un encanto especial. Esta al lado de la Piazza Navona, en Arco della Pace. Su cafetería es preciosa, muy tranquila y elegante, merece la pena ir a tomarse un café por la tarde o una copa después de cenar. Además, al contrario de lo que se puede esperar, no es en absoluto cara. Me descubrió este sitio una amiga, y desde entonces, es de nuestros sitios preferidos para ir. Aún no he conocido a nadie que no se haya quedado enamorado del lugar.

http://www.chiostrodelbramante.it/

Chiostro del Bramante
Arco della Pace, 5

Hogar, dulce hogar.

Empecemos por el principio. Creo que para cualquier estudiante Erasmus (soy Erasmus, creo que no lo había dicho), una vez elegido, y concedido, el destino, el primer gran reto es conseguir una casa. Hay ciudades en las que hay muchas residencias de estudiantes, en las que incluso la misma universidad te puede facilitar alojamiento. En Roma no es así. En Roma, buscar piso es una tarea algo complicada, pero también divertida. ¿ La única premisa? Armarse de paciencia y sentido del humor.

¿Por dónde empezar? Yo lo primero que hice fue poner un anuncio en Easy Stanza (http://www.easystanza.it/), una web de anuncios bastante útil. Comencé también a ver qué me podía interesar de lo que se anunciaba. En mi caso, tenía bastante claro que quería una habitación individual, y además, quería vivir con una amiga que también se venía a Roma y que buscaba otra "stanza singola."  A partir de aquí, empecé a seleccionar los anuncios que me resultaban interesantes y a enviar correos como una loca.

Lo único malo de Easy Stanza es que para acceder a todos los datos de los anunciantes tienes que ser usuario de pago, si no, sólo puedes acceder a los datos de quienes eligen mostrarlos, que no son la mayoría. Tampoco te toman igual de en serio si no eres de pago.Yo lo que hice fue pagar el mes antes de ir a Roma a ver los pisos para poder ponerme en contacto con aquellos que me interesaban más. No fue mucho, creo que 20 euros a medias con mi amiga con la que busqué piso, y mereció la pena.

Otra web de anuncios bastante útil es http://www.bacheca.it/, pero no es sólo de anuncios de pisos, así que prepárate para navegar en un mar de información. También recomiendo ponerse en contacto con tu Universidad en el país de destino, porque muchas tienen servicio de alojamiento.

Por otra parte, recomiendo ir a Roma antes a ver los pisos. Yo, por ejemplo, fui en el mes de junio con mi amiga para ver algunos de los apartamentos que habíamos seleccionado a través de Easy Stanza. Obvimente, hay que ir con los deberes hechos. Nosotras, además de haber concretado citas con los propietarios, hablamos con estudiantes que habían estado años anteriores en Roma para que nos facilitaran los datos de los pisos en los que ellos vivieron. También es bueno hacerse con el periódico Porta Portese al llegar a Roma, hay muchísimos anuncios interesantes.

Estuvimos sólo tres días en la ciudad, tres días agotadores en los que vimos como 10 apartamentos. Pero mereció la pena, porque encontramos la que hoy es nuestra casa. El nuestro fue un caso especial. NO pagamos nada, pero la casera nos reservó el apartamento. Normalmente te piden que dejes algo a cuenta. En caso de hacerlo, extremar las precauciones. En ningún caso recomiendo pagar nada a través de internet y sin ver la casa antes. Hay gente que se lleva auténticas sorpresas.

Como he dicho, la tarea de encontrar piso fue complicada, pero cuando en septiembre llegamos a Roma, pudimos alojarnos directamente en nuestra casa. Si no se puede venir antes a buscar piso, no es el fin del mundo. No conozco a nadie que no haya encontrado casa. Eso sí, hay que venir con cosas miradas, es la única forma de pasar menos de una semana en un hostal. Nosotras nos lo preparamos todo mucho, pero también tuvimos suerte. Encontramos una casa preciosa que está al lado de San Pedro, en una zona tranquila y con todo tipo de servicios. La compartimos con dos chicas mexicanas con las que la convivencia es perfecta. Me hubiese gustado vivir con gente italiana, pero a las "mejis" no las cambio por nada.

Al principio puede ser duro, y hay gente que se ha llegado a desesperar. Pero con paciencia, información y un poquito de cautela, se encuentra casa. Y entonces, sólo te queda disfrutar de la experiencia.

Un detallito de mi casa romana. Está completamente nueva, la casera la reformó en verano. De hecho, cuando la vimos estaba en obras. Está decorada en rojo y blanco. Una casa muy de chicas.

El lugar por el que paso todos los días.

The reason why



Llevaba tiempo retrasando este día por unas cosas y por otras, pero creo que ya ha llegado el momento. Aterricé en Roma el pasado 14 de septiembre para estudiar aquí durante un año. Me bastaron unos días para darme cuenta de que esta ciudad está llena de historias, de secretos y de lugares que harían de esta experiencia algo inolvidable.

 Antes de venir aquí me había planteado en algunas ocasiones empezar a escribir un blog sobre algunos de mis intereses, pero sin duda el comenzar a vivir en una nueva ciudad era la oportunidad perfecta. Sin embargo,  los líos del principio, el proceso de adaptación y por qué no decirlo, la indecisión, hicieron que fuera dejando para mañana el comenzar a escribir. Hasta hoy.

Respondiendo al título de la entrada, me gustaría explicar por qué elegí Feels like Rome como nombre para el blog. Siempre me ha gustado como suena la expresión inglesa "Feels like home", similar a la española  "sentirse como en casa". Y esa era mi principal aspiración cuando llegué a Roma, poder llegar a sentirme como en casa. Así que un pequeño cambio de palabras, y ya tenía nombre para el blog.

Por otra parte, quiero que en Feels like Rome tengan cabida también aquellos temas que me interesan como la publicidad, el arte, el cine, la moda o el diseño.

 Así que con todas estas ideas que tenía en la cabeza y la experiencia que tengo por delante, comienzo definitivamente hoy con Feels like Rome.

   Ésta fue la canción que más escuché antes de mi llegada a Roma. Algo personal, me recuerda mucho al comienzo de todo esto.